Un pueblo perdido en la estepa de Mongolia. Cansados de luchar contra el avance del desierto, los habitantes se han ido poco a poco. Sólo unos cuantos se han quedado con el jefe Hungai y plantan árboles en la zona. Pero nada puede detener el éxodo. Incluso la mujer de Hungai acaba marchándose. Hungai queda sumido en el dolor y la desesperación hasta que aparece Choi Soonhee, una refugiada coreana con su hijo. La mujer se adapta a las costumbres del desierto y también empieza a plantar árboles. Ahora los tres dependen el uno del otro para sobrevivir en un ambiente tan hostil donde nada es tan simple como parece..